lunes, 11 de febrero de 2013

Los seguros como mecanismo de financiamiento para actividades delictivas


Autor: Lic. Edwin Granados Ríos
La vida criminal (principalmente en el crimen organizado) requiere todo un andamiaje que en sentido general a un gran sector de la sociedad le resulta difícil de aceptar, pues va en contra de los valores tradicionales, la actividad diaria del delincuente exige que defina los mecanismos para que ese modus viven-di  tenga apariencia de legalidad y en ese tanto es un peligro constante por su camuflaje para quienes viven al margen de la vida delictiva y para las organizaciones licitas.
Esos mecanismos inician con aspectos que se relacionan con el conocimiento, la voluntad y las emociones, que requieren cimentar para entonces actuar con la frialdad que requieran. La actividad criminal no solo se circunscribe a aquellas situaciones radicales en las que solo se dan asesinatos y/o violaciones, éstas aunque muy terribles por sus manifestaciones y consecuencias, son tan solo una vertiente en la amplia gama de hechos delictivos que ofenden la dignidad del ser humano y que no entraré a detallar; pues son incontables y no constituye el objeto de este artículo.
En algún momento se toma la decisión por parte del individuo respecto de la ruta de su vida y es entonces cuando se decide también que tipo de delincuente se desea ser, algunos se encuentran en el camino  de la criminalidad por situaciones circunstanciales y otros flagrantemente lo deciden, pero cualquiera que sea la razón u origen, el punto es que se requerirá ser lo más efectivo posible y en virtud de ello, es entonces que inicia un proceso de “formación”.
En virtud del contexto de análisis que deseo hacer está vinculado al Crimen Organizado, en el cual existen estructuras de funcionamiento y su principal objetivo; entre otros, están los financieros  siendo que tienen una importancia vital el hecho de analizar cuáles son entonces los mecanismos para nutrirse financieramente y/o legitimar capitales, llevándolos limpios a los entes bancarios.
En el contexto del crimen, esa forma de vida puede llegar a ser considerada “normal” y desde su punto de vista, su actividad sencillamente es su negocio y trabajo (aunque ilícito) se puede tener pérdidas y ganancias, en algunos casos le es tolerable, aceptándolo como el riesgo de su actividad y en otras; sencillamente no es tolerable y, se procede con ejecuciones fríamente calculadas y vengativas, como sucede con la actividad del sicariato, ésta última por cierto que subsiste en virtud de que la sociedad actual cada vez es más intolerante e incapaz de resolver los problemas y se ha aprendido por las generaciones actuales que esa es una forma de “eliminar” problemas y/o competencia, en resumen hay demanda.
Actualmente sabemos que las sociedades de cualquier latitud son generadoras de múltiples formas de actividades delictivas y muchas requieren formas de financiamiento.
Los seguros por la vulnerabilidad al fraude se convierten en instrumentos facilitadores de delitos, algunos adquirieren bienes muebles e inmuebles que se originan en el fraude a los seguros, para muchos la incursión en esta ilícita actividad inicia de forma circunstancial y se “engolosinan” para luego iniciar una “carrera” que les genera dinero fácil, otros incursionan en esta actividad de forma más “profesional” convirtiéndose en gente muy adiestrada en la comisión y montaje de fraudes.
Ahora, de este paso a los vínculos con el crimen organizado, no existe más que un pequeño paso y es que la comisión de los delitos asociados a los seguros traen consigo una serie de riesgos por su complejidad lo que ante una entidad aseguradora con un buen equipo anti-fraude se pueden convertir en verdaderos dolores de cabeza para los delincuentes.
No obstante; el fraude a los seguros, no dejan de ser mecanismos efectivos de financiamiento para la comisión de una serie de hechos delictivos, pues provee dinero “limpio”, una vez descubierto esta situación, no resultaría extraño que mediante la adquisición de bienes muebles e inmuebles, el crimen organizado construya todo un engranaje en el cual se tome como un mecanismo más el fraude a los seguros para circular su dinero y hacerlo retornar como dinero limpio.
Sobra decir que en la cultura de quienes viven en él y del narcotráfico, uno de los elementos que más les evidencian es la forma de vida ostentosa, adquiriendo entre muchas otras cosas, bienes muebles e inmuebles lo más lujosos que puedan, el movimiento y comercialización de estos bienes, hace que muchos individuos dedicados al crimen, deseen asegurar sus bienes a veces con objetivos fraudulentos y otras sencillamente por el deseo de mantener sus bienes asegurados por considerar que ese riesgo debe ser protegido; claro, que todo cliente debe ser conocido como lo disponen las normativas contra el LD/FT, es así que mucha de este tipo de personas involucradas en el crimen organizado que pueden ser identificados en la entidad aseguradora.
En el ámbito del LD/FT, uno de los problemas con que se enfrenta el sector seguros para poder aportar al control de este flagelo es la forma en que se da la génesis de los delitos en este sector y el hecho de que las autoridades de inteligencia financiera no sacan de sus mentes que su origen y manifestación no es igual a la de los bancos, no se puede esperar que un reporte de operación sospechosa en una entidad aseguradora, tenga las mismas condiciones que las que se originan en un banco, pues la forma en que circula el dinero en los entes aseguradores difiere a la bancaria.
El fraude a los seguros tiene impacto en las compañías de seguros y en sus clientes, así como en la sociedad en general porque puede utilizarse para financiar la actividad criminal, ésta no es una actividad sin víctimas o insignificante.
¿Qué es el fraude de seguros?
Afecta a todo tipo de seguros e incluye:
Proporcionar información falsa o incompleta (Esto va en contra de los sanos intereses de una compañía de seguros, que se presuma responsable, pues va contra las normas generales del Conozca a su Cliente, tema que solo por negocio ya resulta sumamente importante conocer bien al cliente)
Presentación de reclamos por pérdidas indicando circunstancias engañosas o falsas o aumentando las consecuencias del daño ficticiamente sobre un evento genuino (Normalmente están vinculados terceros a los que la entidad aseguradora, no se preocupa por conocer, que pueden resultar ser delincuentes organizados con los que el asegurado titular en realidad o no tiene relación o es un testaferro para efectos de lograr el contrato póliza). Esto deja claro que el ilícito puede ser cometido por el asegurado o por un tercero.
Puede ir desde reclamos oportunistas en virtud de que en esencia quizá esa no fuera la intención original, pero que poco a poco escalan a actividades que son altamente organizados por anillos del crimen, lo cual nos hace evidenciar que esta actividad puede constituirse en una fuente generadora de recursos para el sustento de actividades criminales, sobre todo para el lavado de dinero que obviamente llegará limpio a los bancos.
Ahora es claro e innegable el hecho de que contrario a lo que ocurre en los bancos; las entidades aseguradoras, cuentan con mayores posibilidades de interactuar con sus clientes a un nivel más profundo, esto en virtud del vínculo mediante el aseguramiento y más aún con el proceso del reclamo, pues en tanto exista la expectativa del pago de una indemnización habrá mucho interés del cliente o beneficiario en contribuir con toda la información posible con el interés de lograr aquel propósito.
Detener y reducir el fraude de seguros es una prioridad clave para los aseguradores, pero no debe serlo solo para ellas en el tanto al final si se convierte en una fuente financiamiento para actividades delincuenciales, debe llamar la atención de los gobiernos y entes reguladores, éste no es un crimen sin víctimas y refleja graves consecuencias para los culpables de fraude, para el ente asegurador, para los clientes y sobre todo para la sociedad.
La industria de seguros continúa con el fortalecimiento de sus sistemas y controles para asegurar que todos los tipos de fraude y está desarrollando sistemas muy particulares de clasificación de clientes desde la perspectiva de la prevención del LD/FT, esto último es todo un reto, pues era tema ajeno a los seguros hasta hace algunos pocos años; no obstante, los seguros son un mecanismo facilitador para el financiamiento de actividades criminales.